Cartas de una Ilustrada Perrita 3

Thimphu, Bután, 21 de Noviembre de 2005

Querido D.

Ya llevamos casi un mes en el Reino de Bután, y este Pepsi Tour 2005-2006 me hace tanto bien, me ha renovado, me siento más fresca ahora mi D. Te escribo para contarte que después de mucho discutir y planear, hemos concluido la grabación del comercial. Chuck Norris, quien junto a mi protagoniza este comercial, es un samurai que viaja en su caballo blanco de raza mongol por el Valle del río Bhu, aquí en Bután, y ve como una exhuberante turista cae al río en un intento fallido por rescatar su cámara, la blusa blanca y mojada de ella (yo) deja ver sus brotados pezones, y Chuck, quien en medio de este erizador frío monta descamisado, ve cuando ella cae y corre a su auxilio. El director quiso mucho color blanco y lo nevado del paisaje ayudaba de manera exacta su intención. Chuck vestido apenas con un pantalón negro de seda -porta además una mochila blanca y ha sido maquillado al estilo asiático en los ojos para ocultar su mirada de macho occidental- se lanza al agua helada a rescatarme, me toma en sus brazos, me lleva a la orilla y me da respiración boca a boca. Ella (yo) despierta. Él la sube a su caballo y saca de su mochila dos pepsis lata que comparten junto al río bhutanés. Ya sé que esto te parecerá muy videoso mi D., pero estamos cansados en todo el Mundo de ver comerciales sobre esta región, en dónde sólo aparezcan templos y sacerdotes budistas, y creo que el director logró resaltar algo nuevo de este país, que son los rápidos en los ríos que bajan de los Montes Himalaya y la tradición de viajar en caballos blancos. Al final, en un primerísimo primer plano, aparecen dos latas de Pepsi y la cámara que había caído al río en la orilla del mismo, y al fondo de la escena Chuck y ella (yo) subiendo la montaña montando el caballo blanco, mi voz en off dice sha ghata tami (Pepsi, pide más) Quiero decirte además que ya no te extraño tanto. Y que esta vez a diferencia de la pasada es real. Miguelo Carvalagio está entrando en mi vida de una manera que no imaginé y él ha logrado importantes cosas para mí, como que reconsideraran pagarnos el doble por este comercial. Ahora entenderás por qué me había tardado tanto en escribir D. He estado muy entretenida y entrepiernada. Lo siento D. Amor de lejos amor de pendejos y felices los cuatro, así que dile a tu niña de Maracaibo o de no sé cuál de esas ciudades "agáchese" latinoamericanas que yo te regalo con todo gusto y que le mando a decir que puede quedarse contigo y con todas tus mañas de gitano chiviado. Miguelo Carvalagio y yo hemos compaginado perfectamente, como tinta negra sobre papel pergamino y quiero decirte que lo nuestro, lo tuyo con lo mío, agoniza cada vez más. Te reitero que con él siento un calor extremo no sé dónde y mi desesperación fue más fuerte que mi pudor. Creo que todo va quedando bien claro ¿no? Bueno y Chuck Norris te manda saludos, que si no te acuerdas que te pagó un buen billete verde por una consulta, en la que tu le aseguraste que él sería el gobernador de Montana y pues, Chuck perdió las elecciones y tu te desapareciste, que recuerdes que tu garantizas las predicciones con la devolución del dinero y ahora que me acuerdo con esa plata tu montaste el Templo de la Adivinación Daniélica en Chaparral Tolima. No sé D. sigue extendiéndote a nivel nacional pero deja esa bendita maña de estafar a las personas que se la ganan sudando como Chuck, además que es terrible que me involucres en tus asuntos. Cuídate y acoge mi consejo entre tus vigorosos brazos.


Ya no te echan tanto de menos estos dos pezones ardientes.

Perrita Ilustrada